"Homenajeando a Enrique Gagliardi reconocemos a la propia facultad"

El martes 14 de mayo a las 19 horas tuvo lugar el homenaje al Prof. Enrique Gagliardi en el salón 7 de FCEA, salón que ha sido renombrado con el nombre del Profesor. Entre los asistentes acudieron familiares, amigos y colegas de profesión, además de Jorge Xavier, el Decano de FCEA; el Profesor Gerardo Prieto; el Profesor Ariel Davrieux, y el Rector de la Udelar, Rodrigo Arim.

Jorge Xavier, Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, tomó la palabra en primer lugar para dar la bienvenida a todas las personas que asistieron al homenaje, en particular a su esposa Cristina y a sus hijas Luciana y Victoria.

“La propuestas por esta comisión que se conformó ad-hoc de homenaje a Enrique, recogió un apoyo masivo y rapidísimo”, aseguró Xavier. Añadió que “este tipo de propuestas en este tipo de instituciones que, muchas veces, fruto de su masificación, se vuelven algo impersonales y frías, nos hacen muy bien porque nos dan un baño de humanidad que creo que como institución tenemos que destacar”. Con respecto a la propuesta de la comisión ad-hoc, dijo: “a partir de esta propuesta de un grupo de docentes, egresados y amigos de Enrique sobre este homenaje, lo tomamos con calor en el Consejo. No fue objeto de discusión e inmediatamente dijimos que teníamos que acompañar esta propuesta porque nos hace bien como institución”.

Posteriormente dedicó unas palabras a la trayectoria de Enrique: “encontré que, a lo largo de sus 35 años de docente en nuestra facultad, tuvo un desempeño en el área de economía y gestión bancaria y en macroeconomía, iniciando su carrera como muchos, desde un nivel muy bajo pero llegando muy rápidamente a ocupar cargos de profesor titular, fruto de esa rigurosidad que imponía en todos los ámbitos de su vida, de esa calidez que lo testimonia esta propuesta de reconocimiento y designación de este salón con su nombre”.

“Conocí a Enrique precisamente cuando él iniciaba su actividad docente, en el año 1983, cuando Enrique era funcionario del entonces Banco Comercial y, tratando de recordar mis primeros contactos con él, recuerdo que siempre se caracterizó por esa pasión por entender todo lo que hacía, por ponerse en el lugar del otro, por tratar de razonar también con el sombrero del otro y de construir de forma conjunta desde una perspectiva claramente humana. Relacionarse con Enrique fue siempre sencillo, entre otras cosas porque él no asumió un rol distante, sino todo lo contrario. Era siempre muy cercano a todas aquellas personas con las que se vinculaba, fruto de su desempeño como docente”.

Agregó: “Enrique fue reconocido como mejor docente del Departamento de Economía de nuestra facultad en el año 2016 y anteriormente había sido distinguido por la Universidad ORT. Fue el primer coordinador ad honorem de la Unidad Académica de macroeconomía del Departamento de Economía en un período complejo de nuestra facultad, en medio de un proceso que estábamos promoviendo a partir de la iniciativa indudable del señor Rector que nos acompaña, un proceso de transformación profunda de nuestra facultad que explica mucho de lo que hoy podemos mostrar con orgullo. Claramente el escaso tiempo transcurrido nos ha hecho comprender la enorme pérdida que para nosotros significó como institución, y creo que también esta muestra de respeto y de cariño que se generó tan rápidamente lo deja claro. Lo recordamos permanentemente, muchas veces con un cierto tono de humor por su rigurosidad, pero a todos nos hace muy bien tomarlo como ejemplo”.

Jorge Xavier destacó una nota que recibió agradeciendo la invitación y planteando la posibilidad de estar presente. La remitió el Profesor Julio Porteiro que dice brevemente:

Agradezco la invitación al merecido homenaje al profesor Enrique Gagliardi. Lo conocí en su trayectoria académica y trabajamos juntos en el campo profesional cuando integró la comisión fiscal del Nuevo Banco Comercial, institución bancaria que tuve el honor de presidir. Con profundo pesar les informo que no podré participar del evento debido a que estaré en el exterior en la fecha programada. Deseo también en su persona, señor Decano, extender mis felicitaciones a la facultad por la iniciativa de efectuar este reconocimiento a un docente ejemplar cuya valiosa formación e incomparable dimensión humana fue un ejemplo a seguir por todos quienes convivimos con él durante sus proficuos años de labor universitaria.

Finalizó así su intervención, cediendo la palabra al Profesor Gerardo Prieto.

Prieto es parte de la comisión ad-hoc y transmite el agradecimiento de la misma por hacer el evento posible. Tomando las palabras del Decano, añadió: “Enrique ya fue homenajeado en vida. Todo homenaje a posteriori resulta poco pero el sentido es seguir homenajeándolo. Pienso que Enrique en vida tuvo un homenaje. Remitiéndome a la década de los noventa cuando lo empezamos a conocer cuando era docente del teórico de Economía II, recuerdo que en el Cine 18 de Julio, cuando él terminaba su parte recibía siempre aplausos, era emocionante. Quiero hacer énfasis en la llaneza que tenía en torno a la coordinación y dirección de grupos. Venía con la solución de las pruebas que tenía y las sometía a la votación de todas y todos con total llaneza sin importar el grado docente. Se preocupaba siempre de que cada uno de los docentes que éramos parte de su grupo de cátedra estuviéramos siempre formados, y a los que ya no eran parte de su grupo, les decía que tendrían siempre las puertas abiertas para cuando quisieran volver”.

“La preocupación principal de Enrique era el estudiante”, añadió Prieto. “Siempre tenía sus clases claras, precisas, actuales, fomentaban a los estudiantes a tener un proceso continuo y permanente que es el aprender a aprender: el techo no se lo formaba el docente, sino el propio estudiante, y había constantemente un incentivo a seguir formándose, y eso es un activo muy importante para la universidad”.

Con respecto a sus estudiantes, señaló que “no solo formó a gente a nivel nacional, sino que también a gente que después destacó a nivel internacional y que destacan en otras universidades”.

Para finalizar, dijo: “hay que destacar el trabajo de Enrique Gagliardi al pie del cañón frente a un pizarrón, y ese es un activo muy importante en una casa de estudios como la nuestra. Hoy realizamos, y ojalá podamos continuar haciéndolo en nuestras aulas, un justo, humilde e imprescindible homenaje a un profesor maestro de maestros, excelente persona. Siempre te recordaremos con respeto y como un ejemplo”.

El Profesor Ariel Davrieux, tercero en intervenir, saludó en primer lugar a la esposa y a las hijas de Enrique Gagliardi, al señor Decano, al señor Rector y a los presentes. “Quiero en primer lugar, en calidad de compañero docente, colega, amigo y admirador de las aptitudes de Enrique, agradecer a las personas que promovieron esta iniciativa, y a los Consejeros y Decano por haber aprobado esta denominación que, entiendo como mínimo, un justo homenaje a quien dedicó gran parte de su vida a la facultad con dedicación, inteligencia y esfuerzo. De hecho, de los 34 años que mencionan, me perdí cuatro, porque fuimos compañeros docentes 30 años y 24 años compañeros en la cátedra. Fue el primer ayudante Grado 1 de la Cátedra de economía II. Avanzó rápidamente en la carrera docente, y siempre por concurso, habiendo trabajando y haciendo méritos permanentemente. Los primeros años fue ayudante, después adjunto y después titular. Él era el que realmente dirigía y organizaba la cátedra. Nunca encontré a nadie parecido en cuanto a capacidad de organización y en llegada a los estudiantes. Él llevaba a cabo la evaluación docente hecha por estudiantes, y esas evaluaciones docentes le funcionaban a Enrique. Entre el año 1944 y el año 2008 no creo que haya habido mejor docente de la materia en Uruguay, o al menos en la Udelar, que Enrique Gagliardi”.

Finalizó con unas palabras: “quiero agradecer y felicitar a los de la iniciativa y felicitar al Consejo, porque en la medida que honran a un hombre distinguido y esforzado del grupo universitario que integramos, están honrándose a sí mismos y al Consejo de la facultad”.

En último término intervino Rodrigo Arim, Rector de la Udelar. Dio las gracias a la facultad por la posibilidad de volver a esta casa de estudios en un evento de esta naturaleza, que es reconocer a Enrique en su trayectoria en la facultad y saludar a la familia. “Hemos hecho varios homenajes en distintos momentos a Enrique y yo creo que posiblemente el homenaje que mejor caracteriza su trayectoria tiene que ver con el reconocimiento en la función de enseñanza que hizo en el Departamento de Economía oportunamente porque Enrique, si algo era en esa vida docente que es multifacética, que implica encarar distintas funciones, es un docente dedicado a sus estudiantes en contextos que, todos sabemos, no eran los más adecuados por la época que transitaba la facultad”.

“Enrique, además de ser reconocido por generaciones de estudiantes, fue reconocido por generaciones de docentes que se formaron en la vieja Cátedra de Economía II en el área de macroeconomía. La composición de esta misma reunión donde hay varias generaciones de estudiantes y docentes con distintas trayectorias indica ese reconocimiento. Era una envidia para varios y nos generaba un problema a otros porque era un punto de referencia obligado para comparar”.

Destacó además que su aporte a la facultad no se agota en la función docente. En lo que respecta al proceso de departamentalización, enfatizó Arim, “Enrique nunca se quejó. Siempre se preocupó y a veces planteaba sus discrepancias con algunos temas, pero siempre encaró el problema como un problema que tenía que ver con decisiones que la facultad había tomado para cambiar un modelo de organización de cátedras a un modelo de organización departamentalizado. Algunas de las medidas que se tomaron no fueron las más cómodas para los docentes pero él siempre asumió las responsabilidades que le correspondían sin transferírselas a otras personas, para así encaminar el proceso de la manera más ordenada posible”.

Con respecto a la labor de la facultad, dijo que “lo único que puede hacer respecto a Enrique es agradecer profundamente todo su aporte a lo largo de todos estos años y creo que este tipo de eventos, que no son tan frecuentes en la facultad, hacen que la propia institución se reconozca a sí misma a través del cuerpo docente que fue construyendo esta realidad que vivimos hoy. La generosidad de Enrique y su capacidad para incentivar, ordenar en contextos complejos de docencia masificada, incentivar al cuerpo docente a que tomara decisiones para seguir formándose y asumir responsabilidades para que ello pueda suceder también, es parte medular de esta historia”.

Finalizó: “agradezco a la facultad la posibilidad de estar acá, la invitación. Son de las cosas sentidas que hacemos, porque en realidad reconociendo a Enrique lo que estamos haciendo es reconocer a la propia facultad en su trayectoria institucional”.

Jorge Xavier volvió a intervenir para destacar una nota que remitió el Departamento de documentación y biblioteca de la facultad, que dice:

En el día de hoy se dedica un merecido homenaje al Profesor Gagliardi y la biblioteca no ha querido permanecer ajena al acontecimiento. Deseamos enfatizar en aquellas características personales que convirtieron al Profesor Enrique Gagliardi en un excelente colaborador por muchos años y en todo momento con el departamento. Aprendimos a apreciarlo por su permanente disponibilidad, por su capacidad de diálogo, intentando entender y solidarizarse siempre con nuestros objetivos como profesionales de la información. Su espíritu generoso quedaba evidenciado a través de la donación espontánea de su producción bibliográfica en cuanto era publicada. Sabíamos que al profesor no era necesario llamarlo para pedirle, lo veíamos atravesar la puerta sonriente y con algunos ejemplares de su último libro bajo el brazo. Esa generosidad ha continuado de la mano de su esposa, que no dudó en llevar a la biblioteca su colección personal contribuyendo así, en gran medida, a la formación de futuros estudiantes de la facultad. Deseamos expresarle desde aquí a su familia y amigos el agradecimiento por haberlo conocido y por haber aprendido a estimarlo por sus irreprochables cualidades humanas.

Después de la intervención de todos los expositores se invitó a los asistentes a destapar la placa que reconoce al Salón 7 con el nombre de Enrique Gagliardi.

Discurso de homenaje al Profesor Enrique Gagliardi de la comisión ad-hoc.