--Irene Centurión, Cecilia Lara, Carolina Román
En el mes de enero de 2021 se realizó la publicación del artículo “El uso de la rúbrica para evaluar tareas en entornos virtuales de aprendizaje: un caso aplicado a estudiantes avanzados de la carrera de economía.” en la Revista de innovación docente universitaria de la Universidad de Barcelona. El mismo recoge una de las tantas experiencias de evaluación desarrolladas en el marco de la función de enseñanza durante el año 2020. A continuación, se presenta una breve reseña del artículo, cuya versión completa está disponible en este enlace https://revistes.ub.edu/index.php/RIDU.
La UDELAR, cuenta con un Entorno Virtual de Aprendizaje (EVA) desde 2011, sin embargo, la modalidad no presencial no se había expandido hasta principios de 2020, momento en que la emergencia sanitaria derivada de la COVID19 impide la presencialidad. En este contexto surgen experiencias de innovación docente, como en la unidad curricular de Economía de América Latina, que sientan las bases para el análisis y la reflexión sobre un mejor aprovechamiento de las posibilidades que brindan los formatos mediados por TICs. Esto permite, además, fortalecer la comunidad docente desde el intercambio de buenas prácticas y la reflexión sobre casos particulares y experiencias. El principal objetivo de este trabajo es dejar registro de una experiencia positiva realizada en este contexto que contribuya a la caja de herramientas de los docentes universitarios de grado, de modo de generar bases sobre las cuales seguir experimentando.
La nueva modalidad de enseñanza cambia el rol del docente que actúa como facilitador del aprendizaje, acompañando el rol protagónico del estudiante complementado con evaluación continua de carácter básicamente formativo, que permitan hacer devoluciones que guíen su trabajo. Esto genera la necesidad de diseñar instrumentos de evaluación acordes al proceso de enseñanza y aprendizaje que se está desarrollando, que estén alineados a los objetivos del curso, al propósito de la evaluación, a los contenidos y a la población objetivo (Covacevich, 2014). En este sentido, se sugirió la implementación de evaluaciones a distancia que cambian el paradigma tradicional de evaluación centrado en la acreditación de conocimientos y recuperación de contenidos, por una modalidad de evaluación continua con énfasis en el carácter formativo y la formación en competencias, reconociendo que la acreditación se realizará en un entorno menos controlado y con acceso a materiales y otros recursos.
En este nuevo contexto, se torna más necesario transparentar los criterios de evaluación a través de consignas claras y exhaustivas, ya que la comunicación, sincrónica y asincrónica, se ha trasladado fundamentalmente a los entornos virtuales requiriendo el uso de diferentes códigos de lenguaje. La rúbrica colabora con este objetivo en tanto es una matriz de valoración que incorpora en un eje los criterios o dimensiones a evaluar y en el otro eje una escala de logros. Cada intersección describe explícitamente que se interpreta en cada uno de los niveles de logro de una dimensión. La rúbrica no sólo ayuda a mejorar la consigna agregando aspectos que no estén claros, sino también guía al docente en una corrección ecuánime de los trabajos manteniendo las ponderaciones de las distintas dimensiones y la puntuación de acuerdo a los diferentes niveles de logro. Las rúbricas pueden ser incorporadas al ambiente de trabajo de moodle, son uno de los mecanismos de calificación avanzada. Moodle permite que los estudiantes vean las rúbricas junto con la consigna actuando como instrumento de una primera etapa de autoevaluación. A la vez, facilita la tarea del evaluador en tanto la corrección se realiza dentro de la plataforma, seleccionando para cada una de las dimensiones el nivel de logro alcanzado por el estudiante. Como resultado, moodle genera además de la calificación final una retroalimentación estandarizada que muestra la descripción del nivel de logro en cada una de las dimensiones y permite agregar comentarios personalizados por parte del evaluador si esto fuera necesario.
Economía de América Latina
Economía de América Latina integra la Unidad Académica de Historia y Desarrollo y es una materia obligatoria del 5to semestre de la carrera de la Licenciatura en Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración. Además, se ofrece como opcional a otras carreras de ciencias sociales interdisciplinarias (Licenciatura en Sociología, Desarrollo, Ciencia Política, Relaciones Internacionales, etc.). La matrícula por curso es en promedio 300estudiantes (promedio de inscriptos entre 2017 y 2020). El objetivo de la asignatura es brindar un panorama del pensamiento latinoamericano sobre cuestiones del desarrollo económico y de los distintos modelos de desarrollo por los que pasó la región en sus distintas etapas históricas.
La modalidad virtual adoptada a raíz de la pandemia, introdujo cambios en el sistema de evaluación que se transforma totalmente a distancia y se realiza a través de diversas actividades que comprenden pruebas individuales y participación en grupos prácticos. Si bien la experiencia fue más amplia, el artículo se centró en la entrega del trabajo final y la rúbrica creada para su correspondiente evaluación. Esta prueba tiene como propósito evaluar la comprensión de los temas impartidos en la segunda mitad del curso y concentra 40% del puntaje del curso. Si bien los estudiantes pueden intercambiar con sus compañeros ideas, reflexiones, dudas, se trata de un trabajo de creación cuya realización y redacción del trabajo es individual. Gran parte del esfuerzo del equipo docente estuvo centrado en el diseño de la consigna y la creación de la rúbrica de evaluación en la que se detallan los aspectos a evaluar en cada una de las preguntas planteadas en la consigna y lo que se espera de ellos[1] (Ver Tabla 1). En base a estos criterios se define cuando el estudiante alcanza una nota de excelente, bueno, y aceptable.
Tabla 1: Rúbrica de evaluación
Resultados sobre la innovación aplicada
La calidad de los trabajos escritos fue acorde a lo esperado. Dado que era la primera vez que se establecía este formato de evaluación (domiciliario), la preocupación de los docentes estaba concentrada en que los estudiantes lograran realizar un trabajo auténtico, sin plagios ni copias entre ellos. Se realizaron instancias sincrónicas de intercambio dedicadas específicamente a explicar la consigna escrita del trabajo, así como también se evacuaron todas las dudas surgidas por mails o por el foro en la plataforma. Este seguimiento fue parte de un esfuerzo conjunto. La entrega de la rúbrica con antelación les permitía a los estudiantes conocer los criterios de corrección y un rango de la calificación final que podrían obtener. No se detectaron problemas éticos en la realización de la tarea propuesta. Para conocer la opinión de los estudiantes, al finalizar el curso se realizó un cuestionario anónimo, a completar online de forma voluntaria, en donde se preguntó por diversos aspectos del curso.
Esta innovación en el proceso de evaluación del aprendizaje fue valorada muy positivamente, tanto por los docentes como por los estudiantes. Una ventaja relevante del uso de la rúbrica, es transmitir con claridad a los estudiantes lo que se espera del producto a entregar, y con este criterio, los docentes puedan corregir los trabajos. Al tratarse de la primera vez que se aplicó en esta asignatura, quedan en la agenda opciones sobre su uso para experimentar en próximas ediciones y/o en otras asignaturas. En el juicio general de la evaluación, se dejó un margen de puntaje máximo para los estudiantes que incorporan nueva bibliografía e incorporan ejemplos. En este aspecto, es necesario profundizar las acciones que incentiven la búsqueda de bibliografía adicional. En este caso, se optó por proponer la misma consigna a todos los estudiantes, pero otra alternativa sería proponer consignas diferentes por grupos de estudiantes. Por último, se considera la posibilidad de mejorar una de las preguntas cuyo objetivo era generar la reflexión individual a través del trabajo previo con los estudiantes, dando mayor cantidad de ejemplos que ellos tomen como referencia.
Referencias
Anijovich, R., González, C. (2013). Evaluar para aprender. Conceptos e instrumentos. Aique Grupo Editor.
Atorresi, A. (2005). Taller de escritura II. Las respuestas a consignas de escritura académica. Material de Posgrado en Constructivismo y Educación, Buenos Aires, FLACSO-Argentina y UAM.
Barberá, E. (2006). “Aportaciones de la tecnología a la e-evaluación”. Revista De Educación a Distancia (RED). Monográfico VI (2006): Evaluación en entornos virtuales de aprendizaje, pp.1-13. Recuperado a partir de https://revistas.um.es/red/article/view/24301
Biggs, J. (2006). Calidad del aprendizaje universitario. 2a. Madrid: Narcea ediciones.
Covacevich, C. (2014). “Cómo seleccionar un instrumento para evaluar aprendizajes estudiantiles”. División de Educación (SCL/EDU), Nota Técnica, IDB-TN-738, Banco Interamericano de Desarrollo, Diciembre.
Comisión Sectorial de Enseñanza. Unidad Académica (2015). “La evaluación en la educación superior: un escenario de controversia”, Temas de enseñanza, n.º 2, Montevideo: Universidad de la República, Comisión Sectorial de Enseñanza.
Moodle (2019). Rúbricas en Moodle. Documentación de moodle. Retrieved octubre 12, 2020, from https://docs.moodle.org/all/es/P%C3%A1gina_Principal
Pérez Chavarría, J. (2015). Conceptualizando las consignas como parte de las actividades de un curso virtual: una experiencia basada en los procesos de capacitación en la UNED. Revista CAES, 6(2).
Rodríguez Conde, M. J. (2005). Aplicación de las TIC a la evaluación de alumnos universitarios. Teoría de la Educación. Educación y Cultura en la Sociedad de la Información, 6(2). Retrieved octubre 22, 2020, from https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=2010/201021055002
[1] Agradecemos especialmente la valiosa ayuda de Atenea Castillo en el diseño, implementación y monitoreo de la rúbrica.